Sobre esta propiedad
Ubicado al final de un largo camino de entrada, esta finca tradicional española ofrece paz y privacidad en un hermoso entorno rural. Con 246 m² de espacio habitable, la propiedad es ideal para una familia grande, un refugio de vacaciones o una inversión de alquiler. Consta de seis dormitorios y seis cuartos de baño, incluyendo dos estudios independientes con cocina y entradas separadas, ofreciendo una gran versatilidad para invitados o uso comercial.
La casa cuenta con una acogedora naya (veranda) para disfrutar de las tranquilas vistas, un acogedor salón y un comedor que fluye naturalmente hacia la cocina. Las comodidades modernas incluyen agua corriente y electricidad, paneles solares, calefacción central, aire acondicionado e Internet de alta velocidad. La amplia parcela de 11.539 m² ofrece una piscina climatizada y una gran cocina exterior, perfecta para el entretenimiento. Otras instalaciones incluyen dos cocheras, un lavadero con aseo y ducha, y espacio de almacenamiento para los sistemas de calefacción central y bomba de agua.
Un acuerdo con la compañía eléctrica genera actualmente unos 750 euros al mes procedentes de la producción solar, lo que supone un excelente ingreso extra. En la parte trasera de la propiedad, se han plantado 65 árboles de Paulownia, que ofrecen un mayor potencial financiero a medida que maduran.
Situada a tan sólo 10 km de las doradas playas de Guardamar y a 25 minutos del aeropuerto de Alicante, esta finca combina lo mejor de la tranquilidad rural con un fácil acceso a la costa y a los servicios. Una propiedad versátil con infinitas posibilidades.